Francisco I.
Madero

Nació el 30 de octubre de 1873 en Parras de la Fuente,
Coahuila; murió en la ciudad de México el 22 de febrero de
1913.
Estudió en los Estados Unidos
en la Universidad de California, sus padres eran terratenientes y, a
pesar de ello, fue el apóstol de la revolución mexicana, apoyó las
reformas políticas y agrarias, firmó el Plan de San Luis, proclamando el
famoso "Sufragio efectivo, no-reelección"y fue enemigo del sistema
dictatorial de Porfirio Díaz.
En 1908, publicó su libro "La
sucesión presidencial", en la cual arengaba a la población civil para
impedir que el presidente Díaz se reeligiera una vez más. Dicho libro
fue prohibido por el gobierno, eso no impidió que circulara por todo el
país y, proyectó a Madero como el más fuerte candidato opositor de Díaz
a la presidencia de la república.
En el transcurso de la campaña
electoral de 1910, Madero fue hecho preso en la ciudad de Monterrey bajo
los cargos de incitar a la rebelión, siendo encarcelado en San Luis
Potosí, logrando Díaz una muy discutida victoria en las elecciones.
Madero se escapó y se refugió
en San Antonio, Texas, donde se dedicó a atacar al gobierno, iniciando
la Revolución Mexicana. Volvió al país y se unió a la rebelión, al cabo
de una rápida campaña militar, los insurgentes tomaron Ciudad Juárez.
Díaz renunció a la presidencia, por lo que, en 1911, se llevaron a cabo
otras elecciones en a las que Madero fue el ganador.
Ya instalado en la presidencia,
no cumplió con las reformas que había prometido, por lo que en 1912,
Francisco Villa, en el norte del país, y Emiliano Zapata, en el sur,
sintiéndose traicionados, se sublevaron levantándose en armas.
El 18 de febrero de 1913, el
general Victoriano Huerta, jefe del ejército, traicionó a Madero,
encarcelándolo junto al vicepresidente Pino Suárez. Madero se vio
forzado a renunciar, siendo asesinados, la noche del 22 de febrero, él y
Pino Suárez, con el pretexto de tratar de escapar, durante lo que se
conoce como: La decena Trágica.